Cabeza

• Cerebro: el alcohol actúa como depresor en el cerebro, seguramente la persona que ingiera el alcohol se encuentre en un estado de excitación que vendrá seguido de un estado de bajón debido al efecto depresor del alcohol.
• Frente: El alcohol deshidrata. Cuando el cuerpo comienza la metabolización del alcohol, la persona puede sentirse mareado y acabar con un fuerte dolor de cabeza si se ha bebido en exceso.
• Ojos: El alcohol dilata los vasos sanguíneos de los ojos, también afecta a las señales que los ojos envían al cerebro. La visión se vuelve más borrosa, afecta al cálculo de las distancias y de la velocidad.
• Cabello: El alcohol disminuye la presencia de algunos nutrientes en el cuerpo como el zinc, la deficiencia del zinc, provoca la pérdida del cabello.
• Piel: El alcohol dilato los vasos sanguíneos situados bajo la superficie de la piel, haciéndolos más visibles en la nariz, las mejillas y afectando al rostro.
• Oídos: Una persona bajo los efectos del alcohol puede tener dificultades para oír e identificar de dónde provienen lo que les impiden reaccionar a lo que ocurre en su entorno.
• Sueño: El alcohol suprime la fase REM del sueño, afectando a la calidad del mismo.

Corazón

El consumo rápido de grandes cantidades de alcohol, altera el ritmo cardíaco y provoca ahogos.

Higado

El 90% del alcohol consumido se metaboliza en el hígado, el cuerpo tarda en eliminar diez gramos de alcohol puro entre 60 y 90 minutos.

Si la cantidad de alcohol que se ingiere es muy alta, el hígado no podrá metabolizarla bien. El coma etílico se produce cuando hay una sobredosis de alcohol en el cuerpo y este tiene dificultades en metabolizarlo.

Un consumo abusivo de alcohol o la dependencia del mismo deriva en daños en el hígado provocando cirrosis. El consumo abusivo prolongando puede producir cáncer de hígado y otros tipos de cáncer.

Intestino

El alcohol pasa al torrente sanguíneo a través del intestino delgado, si ingerimos alimentos antes de beber el paso del alcohol al torrente sanguíneo será más lento y el nivel de alcoholemia será menor.

Peso

El alcohol tiene muchas calorías (solo las grasas contienen más calorías por gramo que el alcohol). Su consumo puede hacer aumentar el apetito y ganar peso.

Extremidades (manos y piernas)

El alcohol afecta a la coordinación, al equilibrio y los reflejos. Por ello es recomendable no realizar actividades que puedan entrañar un accidente, como manejar maquinaria pesada, conducir vehículos a motor, etc.

Órganos sexuales

El consumo de alcohol puede afectar al rendimiento sexual, haciendo que las relaciones sean menos satisfactorias y conscientes. Las personas que han ingerido grandes cantidades de alcohol pueden verse afectados en su capacidad de toma de decisiones, lo que puede tener consecuencias como los embarazos no deseados, enfermedades de transmisión sexual.